Descripción
¿Por cuánto tiempo su Goliat ha dominado sus días y le ha robado su Paz?
Como David, usted conoce bien la presencia de Goliat. Su Goliat no lleva una espada o un escudo; blande el filo del desempleo, el abandono o la depresión. Su gigante no desfila de arriba abajo por las colinas antiguas; él brinca a través de su oficina, su recámara, su salón de clases. Trae facturas que no puede pagar, adicciones que no puede resistir, un pasado del que no puede deshacerse y un futuro que no puede enfrentar.
¿Por cuanto tiempo le ha estado acechando su Goliat? ¿Invadió su primer pensamiento de la mañana y la última preocupación de la noche?
David saber algo sobre enfrentarse a gigantes. El pastorcillo aparentemente tenía poco que ofrecer contra el Goliat de tres metros. podría leer su historia y preguntarse qué vio Dios en él. A lo largo de su vida, David cayó tan a menudo como se levantó, tropezó tantas veces como venció. Pero para aquellos que conocen la amenaza de un Goliat, David brinda ese recordatorio:
Si se concentra en sus gigantes: Usted tropieza.
Si se concentra en Dios: Sus gigantes caen.
¿Está listo para enfrentar a su gigante?: Deje que la historia de David lo inspire.
El mismo Dios que lo ayudó a él, lo ayudará a usted.